jueves, 17 de junio de 2010

El puto lindo y su magia de radio

Hace varios años, 10 aproximadamente, haciendo zapping radial, me encontré con un programa muy raro, con 5 o 6 personas hablando entre si, una cosa muy extraña. Me enganché, me parecía divertido, ágil, entretenido, más no podía pedir. Un día el programa no sale al aire, sino que solamente había música. Traté de averiguar que había pasado, mi pregunta era ¿por qué no salió al aire un programa en el que intervienen 6 personas?. Luego de unos días pude saber que todas esas personas en realidad era 1 sola: Fernando Peña.
Eso es magia de radio, sin dudas. Después le perdí el rastro cuando él se fue a la noche de Rock&Pop. 1 0 2 años después volvió a Metro, pero a las 7 am., y no lo escuché mucho porque a esa hora yo estaba muy dormido y él muy despierto.
Hace 1 año, cuando murió, yo estaba trabajando. Recuerdo a Rial en la TV diciendo que le estaban llegando las peores noticias de Fernando Peña, y seguido a eso, Matías Martin en Metro se encargó de anunciarlo.
Yo estaba bastante acongojado, era un tipo al que admiraba. Me tocó escribir una breve editorial sobre él pero me la corrigieron bastante porque según me dijeron, al parecer, estaba sensible producto de la admiración que sentía por él y el texto no era lo que se necesitaba, lo cual puede ser muy cierto.
Fernando Peña me hizo conocer la magia de la radio, pensé que escuchaba a 6 personas pero era 1 sola. Algo increíble que solamente puede hacer alguien muy loco pero también muy inteligente.

lunes, 7 de junio de 2010

Yo, periodista

Hoy celebré el Día del periodista, y la verdad es que desde el punto de vista profesional tengo motivos para estar contento.
Es el segundo Día del periodista en el puedo decir que vivo del periodismo. Si bien hago cosas relacionadas con la profesión desde 2005, recién en 2008 comencé a ganar el dinero suficiente como para sostenerme sólo con esto.
A lo largo de estos años aprendí muchas cosas, entre ellas el valor de la perseverancia. Mi escritura mejoró mucho (imaginate lo que era antes). Aprendí a editar audios, a leer una nota en cuestión de segundos y que todos los teléfonos se anotan y se guardan, entre otras tantas cosas igual de importantes. El periodismo, también, me dio la oportunidad de conocer mucha gente, en su gran mayoría buena.
Elegí una profesión que al día de hoy me apasiona. Me permite hablar con gente que admiro, darme gustos, saber cosas antes que otra gente, escribir, charlar mucho y debatir.
De todas formas no todo es color de rosas. Las cosas no siempre salen como espero. Hay corridas, gritos, trabajo contra el tiempo, trabajo en días y horarios impensados; pero es parte de lo que elegí, y me genera una sensación de amor - odio.
Hoy el balance es positivo, nada mal para la tercera carrera que hago. Aclaro: las 2 anteriores las abandoné.
Van 5 años de esto. Espero que recién sea el comienzo.